sábado, 10 de septiembre de 2011

Vuelta hasta Campas de Arraba

  Para no perder costumbre, hoy hemos vuelto a ir a Campas de Arraba. Ayer deje la bici sobre las nueve de la noche y hoy a las ocho de la mañana ya estaba otra vez dando vueltas.
  Sergio me ha llamado poco antes de las ocho porque se habia quedado dormido y llegaba algo tarde. Les he mandado un sms a Manolo y a Txerra para que no tuvieran mucha prisa y no obstante he bajado pronto por si llegaba Manolo.
  Manolo ha llegado pronto y hemos estado hablando un poco en el parque mientras llegaba Sergio. Al final ha llegado sobre las ocho y cuarto o un poco mas y después de hablar con Txerra y comentarle que llegaríamos un poco después de la hora indicada.
  Sergio ha preparado las cosas y poco a poco hemos ido para Galdakao por la carretera vieja. Al llegar a la parada del bus, allí estaba Txerra dando paseos esperándonos. Los cuatro nos hemos ido para Mandoia poco a poco.

  Cuando vas con Manolo y con Txerra sabes que puedes ir de muchas maneras, pero lo que está claro es que el ritmo va a ser mucho más fuerte que si vamos con cualquier otro. Desde el primer momento he visto que no tenía mi día y que hoy me tocaba sufrir. La subida al Mandoia ha empezado con Txerra metiendo un ritmo cañero acompañado de Sergio y la Epic. Manolo me comentaba que no estaba fino y que le estaba costando subir.
  En la rampa de cemento primera he bajado ritmo y gracias a dios que estos también han bajado ritmo porque ya estaba casi sin fuerzas. El resto de la subida hasta llegar arriba ha sido más tranquilo pero a buen ritmo.
  La verdad es que cuando hemos llegado al cruce de Zeberio, el monolito y el buzón, estaba recuperado del empiece de la subida y me encontraba bien.
  Hemos bajado a Zeberio para irnos al barrio de Gesale para ir a Bikotx Gane. Durante todo el camino de Gesale me he encontrado bien, me ha sorprendido porque ayer llegue realmente cansado a casa de tanta bici pero me estaba encontrando muy bien. En el cruce que nos lleva a la carretera de Bikotz Gane, Txerra ha empezado a tirar fuerte y pronto he empezado a notar que aunque yo creía que iba más fino, realmente me estaban pesando las piernas.
  Al llegar al final del camino, donde pillamos la carretera de Bikotz Gane, Sergio también se ha unido a festival de fuerza y en la subida nos ha dejado con un palmo de narices. Se nota que no lleva la enduro y que esta rueda mucho mas. Ahora le he empezado a ver muy fuerte y poco a poco nos ha ido sacando un buen cacho en la subida. Yo he subido con Manolo y con Txerra. Manolo parece que estaba ya recuperado y empezaba a coger tono. Txerra sale ya enchufado de casa, con lo que más bien estaba dejando llevarse y subía con nosotros más al tran tran.
  Al llegar a Bikotz Gane, realmente he subido notando que las piernas pagaban la caña dada estos días, pero aun así hemos subido rápido. Sergio casi llevaba media hora allí y según me ha comentado, ni empezar a sudar aun. La virgen oye, el otro día con la enduro no podía con las pestañas y hoy vuela.
  Hemos parado un rato allí para recuperar energías sentaditos en una mesa. Solo nos ha faltado el bocata de tortilla y la bota de vino.
  Hemos seguido para el empiece de la subida que nos lleva al paso para llegar a la subida de Pagomakurre y Txerra, Sergio y Manolo han acelerado el paso y hemos llegado al bosque rápido. Eso sí, hoy ha soplado algo el aire en el paso más abierto. En el bosque, hemos ido siguiendo el paso que nos daba Sergio durante casi todo el camino. En los últimos metros yo me he descolgado por otro lado siguiendo el camino más ciclable. Estos han pillado un poco de barro y Manolo se ha ido de excursión por dios sabe dónde.
  En la subida a Pagomakurre he decido no acelerarme y subir a mi ritmo. Sergio ha tirado a toda leche para arriba y Manolo y Txerra han subido más tranquilos.
  Cuando he llegado a Pagomakurre, he ido a la fuente dejando la mochila en una mesa. El agua estaba fresca y nos hemos refrescado un poco. He recogido la mochila y no me he dado cuenta que se me habían caído las gafas.
  Hemos subido hasta Campas de Arraba con un aire tremendo. Yo he subido a mi ritmo mientras que Txerra ha salido escopetado, con Sergio intentando llegar a su rueda y Manolo subiendo a su ritmo. Yo por detrás a mi ritmo más tranquilo he subido poco a poco. El aire era tremendo en algunas zonas e incluso llegando al final he tenido que poner pie en tierra. Cuando ha parado he vuelto a subirme y a darle caña. Estos han ido directamente al Albergue de Ángel Sopeña y yo he llegado algo más tarde. Cuando he llegado estaba Txerra haciendo de mecánico y Manolo y Sergio estaban en la fuente refrescándose.
  He entrado al albergue a por un par de coca colas y luego hemos estado un rato de charla fuera. Allí me he dado cuenta que no tenía las gafas. Hemos apurado un poco arriba tranquilos y hemos bajado. Sergio ha ido preguntando si alguno tenía las gafas en la bajada, pero nadie las tenia.
  Hemos bajado hasta Pagomakurre y hemos mirado donde la fuente, donde la mesa pero nada. Supongo que a alguien le aprovechen. Mecawen todo¡¡
  Hemos seguido bajando, Txerra ha salido escopetado y se ha perdido un sendero que nos hemos currado Sergio, Manolo y yo. Nos hemos metido otra vez al bosque y hemos realizado el paso hasta llegar a Bikotz Gane. En la salida a la carretera, Sergio casi se da un buen susto, porque no ha visto una cuerda que hacía de puerta y se la ha comido. Menos mal que bajaba despacio y que la cuerda se ha roto.
  Sergio se ha dado un buen susto y el resto también, porque podía haber pasado algo fuerte si la cuerda es más dura y baja más rápido.
  Para no bajar por carretera, nos hemos metido por el monte y hemos aprovechado que Txerra llevaba el GPS. Hemos ido bajando hasta el final pero por otro camino diferente al que nos llevo Tomas a Intxa, Iajuria y a mí.
  Hemos llegado abajo a Zeberio por el ultimo caserío que está en el camino de Gesale en una bajada más rápida que la hicimos con Tomas. Más rápida y más limpia.
  Desde allí a Zeberio, hemos ido rapidito, aunque para rápido, desde Zeberio hasta llegar a Miravalles. Donde Sergio al principio, ha tirado como un loco, luego han ido entrando al relevo Txerra y Manolo. Yo me he conformado con no perder rueda, porque en algún momento me costaba un poco. Poco antes de llegar a Miravalles, Sergio se ha quedado y yo he preferido dejar de pedalear tan fuerte para ir algo más suave para ir bajando la intensidad. Mañana hay que ir a Gordexola y no es cuestión de acabar hoy tenso como un palo.
Desde Miravalles a San Miguel, he ido regulando un poco la intensidad.
  Parada en la gasolinera donde he repuesto líquidos mientras limpiábamos la bici. Mañana hay que llevarla impoluta.
  Ah, la cámara de fotos vieja ha fallecido el pasado sábado con el barro y agua que había pillado. Una pena, pero hoy solo he podido sacar unas fotos con el móvil. Un asco.

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