sábado, 19 de noviembre de 2011

Txorrierriko Infernua Fail


  Ayer me comentaba Sergio para hacer un par de salidas. O la Martxa de Ubidea o la del Txorrieri. La de Ubidea no teníamos demasiado claro la ruta, puesto que hace mas de un año y pico que la hicimos. La del Txorierri tampoco la tenía demasiado claro pero al final nos decidimos por esa.
  La idea era quedar pronto, a las ocho y media y Sergio quería ir desde aquí a hacerla subiendo por el Vivero para ir poco a poco a la parte de Lezama donde empieza.
  A las ocho y media, más o menos, porque Sergio últimamente no llega a la hora nunca jaja, hemos salido en dirección al Vivero.

  Poco a poco hemos ido a Galdakao por Aperribai, escapando de la carretera y haciendo la ruta que usamos normalmente durante la semana cuando vamos al Vivero.
  La subida nada destacable excepto que nos encontramos con el primo o cuñado o no recuerdo ahora que, de Javi, el de Giant. Este estaba con un amigo que llevaba una Stumpjumper blanca y roja y prácticamente iba sentado en la rueda. No me extraña que la primera rampa de cemento de la subida pusiera el pie en tierra casi al empezar.
  Hemos subido tranquilos y por el camino largo, el que pasa por donde el campo de Golf, donde Sergio me ha dejado claro que nunca jugara al Golf.
  Hemos seguido en dirección al las subidas de las piedras pero en vez de ir para allí y nos hemos ido para abajo, en dirección a Lezama. En un ataque de locura, nos hemos metido por una bajada digna de un video bizikleteando. La bajada muy rota, demasiado. Con piedras húmedas y sueltas y zonas de rocas con mucho musgo verde y grietas donde si mirabas aun se podían ver restos de mamuts desaparecidos desde el Pleistozeno. Una locura para un día como hoy en el que tengo mi supertija pija revisando los retenes y demás componentes. He intentado bajar con la tija normal abajo pero no es lo mismo y mucho he bajado andando porque no me fio de mi mismo. Una pena.
  Hemos salido de ese camino a una carretera y esa carretera nos ha dejado en el mismo Lezama. Hemos seguido desde la salida de la Martxa y durante los primeros metros ningún problema. Luego me he despistado en la primera salida y durante un rato he estado encabezonado con una dirección que no era pero Sergio ha decidido que el organizaba la salida y el decidía la ruta así que le he hecho caso y en realidad si sabia para donde ir.
  Hemos subido un poco y girado a la derecha para coger un camino de cemento donde han construido una casa enorme con unos paneles solares demasiado alejados de ella. Eso nos ha dado un rato de charla hasta que nos hemos metido en el primer sendero. Continuando en fila india sin demasiada prisa tampoco. A un ritmo tranquilo siempre con la cosa de intentar no perdernos. La verdad es que Sergio iba teniendo claro por donde era y aunque hemos pasado por zonas que no me sonaban hemos salido a una zona de casas donde hemos vuelto a dudar. Después de ir descartando subir o bajar por la carretera, nos hemos metido por otro camino con una buena bajada y que aunque no me sonaba tampoco al principio, luego me ha ido sonando. Varios charcos grandes después hemos salido a otra zona de casas donde había una en construcción que Sergio pensó que era un pajar y allí hemos vuelto a coger un camino en un alto que giraba a la derecha. Buena bajada y en mitad de ella un árbol caído. Recordaba un árbol en esa bajada pero no caído, sino creciendo en mitad del camino. Tras pasar el árbol haciendo el indio, hemos seguido bajando y hemos pasado por donde ese árbol para llegar a la parte de abajo donde hay varios pasos de agua que no los recordaba tan profundos. Había que saltar más de un metro de un lado a otro. Yo creo que antes eran más estrechos, lo dice uno que no es hábil y que hubiera recordado haber pasado con las dificultades de hoy.
  Luego hemos llegado al paso de una valla muy bien puesta, que nos da acceso a una campa. Recuerdo que en la anterior vez que pasamos por allí, había gente recogiendo setas. Me da que es propiedad privada y que al pasar nos hemos metido donde no teníamos que meternos. Había caballos correteando por allí. Vuelta a pasar otra valla un poco más adelante y hemos llegado a salir a Goikolegea, donde la Iglesia. Ese ha sido nuestro fin de trayecto, porque luego hemos sido incapaces de seguir.
  Sergio recordaba pasar por donde la Iglesia y meternos por algún camino, pero no recordaba donde y yo tampoco. Hemos ido por varios caminos hasta darnos cuenta que por allí no era. Tres opciones hemos descartado y al final hemos decidido ir para Larrabetzu. La idea era o volver al Vivero a hacer algo de los single tracks o ir al Mandoia a ver qué hacíamos, pero al pasar por Larrabetzu, un fuerte olor a tortilla nos ha perturbado. Después de dar algunas vueltas por el pueblo hemos acabado entrando en un pequeño restaurante donde tenían unas mesas fuera y en compañía de otros ciclistas de ruedas flacas, hemos estado una hora sentados. Después de semejante sentada, la verdad es que ya no apetecía nada ir a ningún lado, y más sabiendo que ya era la una del medio día.
  Cuando hemos decidido salir ya nos hemos enfilado para la gasolinera de Aperribai a darle un agua a las maquinas y recogernos en casa. Desde el rutón verbenero no hemos vuelto a hacer una ruta en condiciones. Todas se nos quedan cortas y está especialmente. Solo ha faltado sacar el periódico hoy.
  En fin, que mañana más y mejor, que leches¡¡

  Perfil

  Fotos












Saludos

No hay comentarios:

Publicar un comentario